PAPITAS FRITAS CRUJIENTES

De vez en cuando nos olvidamos un poco del conteo de calorías y del control del colesterol para regalarnos con una ración de papitas fritas (a quién no le gustan), sin embargo, cuando las hacemos en casa no nos salen tan crujientes como cuando vamos a un lugar donde vendan “comida rápida”. Hoy compartiremos con ustedes un “secretito” que les permitirá competir con aquellas papitas:

-Lave y pele las papas

-Córtelas en ruedas primero y luego haga las “tiritas” o “bastoncitos” que tanto gustan cortando en forma seriada las ruedas en sentido longitudinal

-Escúrralas o séquelas y PÁSELAS POR UN PLATO DONDE PREVIAMENTE HAYA COLOCADO HARINA DE MAÍZ PRECOCIDA -Sí, exacto, esa misma, la de hacer las arepas-.

-Espolvoréeles sal al gusto y fríalas en aceite al cual haya precalentado

(Debe estar BIEN CALIENTE)

-Vaya retirándolas de la sartén en la medida que se vayan dorando (déjelas bien doraditas, por favor) y colocándolas sobre papel absorbente para que en el mismo quede el exceso de grasa –oh, sí, el colesterol...ay-

-Sírvalas de inmediato (son deliciosas calentitas) acompañándolas según su gusto. Acá sugerimos algunas combinaciones:

-Papitas fritas, pollo también frito (doradito), ensalada (rallada) de zanahoria y repollo a la que puede agrerar (si lo desea) algo de cebolla (también rallada, por supuesto) y aliñar con mayonesa o con aceite de oliva y una pizca de sal o sólo con limón y sal.

-Papitas fritas y un recipiente pequeño con salsa barbi-q o salsa de tomate

(o vaciar esas bolsitas de salsa de tomate o de salsa agri-dulce que traemos y dejamos olvidadas en la nevera) Por supuesto, esto cuando es sólo como merienda, entonces se comen “mojándolas” en la salsa de turno.

-Papitas fritas, arroz blanco, bisté y ensalada mixta.

-Papitas fritas...solitas.

Invente sus propias combinaciones y cuando le feliciten por lo crujientes de sus papitas..no olvide mencionar que lo aprendió aquí –háganos la propaganda-.