Aquellas tardes de aquellos años… frescas y llenas de luz donde acariciados por suave brisa juntábamos nuestras bocas y cuerpos en un frenesí que no parecía tener fin ya pasaron, solo quedaron recuerdos. Pero recuerdos al fin de momentos gratos que no se volverán a repetir.
¿Por qué no se volverán a repetir?. ¿Acaso no se puede volver amar ?. Por supuesto que si. Pero el solo hecho de volver a amar en si nada significa pues los tiempos no son los mismos, el sol no brilla igual, el clima ha cambiado, mi piel ha envejecido, algunas personas se han ido, el mundo se ha complicado, la inocencia se ha perdido.
Caramba, ¿Será acaso que no puede haber momentos de amor mejores que se superpongan a los anteriores y de esta manera salir del pasado al que nos someten nuestras viejas pasiones, para volver a amar en tiempo real y así de este sueño en que vivo despertar.?
Vivo, sí, vivo en un error, Ni de casualidad se puede pensar que lo que se tiene es peor que lo que se ha perdido, pues si se perdió o lo dejamos perder era por que no era sustentable. Era sólo un sentimiento fugaz que debió quedar atrapado en el pasado pero que de vez en cuando -para atormentarnos -nuestra mente decide liberarlo y nosotros -es decir, yo- en vez de ese sentimiento aplastarlo y al baul de los recuerdos confinarlo, lo tomo y lo hago presente para sufrirlo, volver a sufrirlo y así de manera masoquista convertirme en una maquina autoflageladora de dolor donde el dolor se vuelve vicio y el vicio- como todo vicio -una necesidad.
FUENTE DE LA FOTO: http://americagarabote.blogia.com/temas/poemas.php
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